lunes, 27 de febrero de 2012

CUIDADO DE LA PIEL EN EL TRABAJO

Hoy en día, las afecciones de la piel representan el grupo de enfermedades profesionales más frecuente entre la población trabajadora, después de las de tipo osteomuscular. El hecho de que exista un gran número de agentes capaces de producir enfermedades dermatológicas (los productos químicos, la exposición al frío o al calor, la fricción continua con herramientas, el contacto con hongos, virus o bacterias, etc.) extiende el problema a diversidad de actividades y de puestos de trabajo: personal sanitario, de la limpieza, peluquerías, laboratorios, talleres mecánicos, carpinterías, horticultores, etc. Hay que tener una especial consideración a los productos químicos, puesto que el contacto con ellos es el factor de riesgo más habitual. A continuación, presentamos una serie de medidas preventivas generales que pueden ayudar a prevenir enfermedades dermatológicas y cuidar la piel.


Medidas Preventivas

  1. Facilitar información comprensible y exacta sobre las sustancias y los materiales que se usan en el trabajo, así como los riesgos que comportan. Del mismo modo, hay que explicar las precauciones que se deben adoptar para evitar estos riesgos, cómo actuar en el caso de contacto de la piel con sustancias agresivas y las medidas básicas de higiene personal (programas de protección cutánea).
  2. Implantar sistemas para que los contenidos de los programas de protección cutánea sean asumidos por los trabajadores. Un medio eficaz para que esta información específica llegue a todo el personal es disponer carteles en los vestuarios y las áreas sanitarias.
  3. Cuidar la higiene personal. En muchas actividades es recomendable la ducha diaria en la empresa después de la jornada laboral, así como la limpieza periódica de las manos y de las zonas de la piel expuestas a factores agresivos. Estas medidas reducen el tiempo de contacto con el producto o material contaminante y evitan su transporte a otros entornos: domicilio, medios de transporte (coche, autocar,etc.) o centros sociales.
  4. Disponer de locales de aseo. La medida anterior requiere la existencia de instalaciones sanitarias con duchas y lavamanos donde la zona sucia esté separada de la zona limpia. El lavamanos es aconsejable que esté dotado de sistemas de abertura que no sean manuales (accionados con el pie, células fotoeléctricas, etc.) para evitar la transmisión de contaminación.
  5. Implantar, de forma prioritaria,medidas colectivas de prevención que sean lo más asequibles a cada tipo de trabajo: sustitución de sustancias nocivas, instalación de sistemas de ventilación y extracción localizada, instalaciones sanitarias adecuadas  y automatización de procesos de trabajo.
  6. Usar las protecciones personales cuando las medidas colectivas no se puedan aplicar o no garanticen el cuidado suficiente de la piel. Existen prendas de protección cutánea (guantes, botas, sombreros, mandiles, caretas, etc.) y productos protectores específicos (cremas o pomadas). Éstas no constituyen una «barrera» de seguridad total, pero son útiles para facilitar la limpieza, proteger de las radiaciones ultravioleta (rayos UV) y para los usuarios de guantes y botas impermeables.
  7. Aplicar la crema protectora sobre la piel limpia antes de iniciar cada trabajo y después de cada descanso, especialmente en la zona de entre los dedos y en la base de las uñas. Sin embargo, estos productos no deben ponerse nunca sobre pieles que sufran algún tipo de alteración, ni debajo de guantes de látex, ya que pueden agravar o favorecer el problema dermatológico.
  8. Escoger el tipo de limpiador según la suciedad. Por lo general, el agua y el jabón son suficientes, pero de no ser así se tendrá en cuenta lo siguiente. Poca suciedad: un limpiador de pH neutro, sin disolventes y menos de un 10% de tensioactivos; suciedad media y tenaz: detergente de pH ligeramente alcalino, sin disolvente para las grasas, y con menos de un 30% de disolvente para colas y pinturas.
  9. Evitar los productos abrasivos para limpiar la piel como son: el serrín, la arena o el jabón en polvo, así como las pastillas de jabón porque en ellas se queda adherida la suciedad. Es mejor utilizar limpiadores líquidos  que sean biodegradables.
  10. Limpiar correctamente la piel.Usar sólo el jabón necesario, frotando a fondo, primero sin agua y luego con poca. Al finalizar, la suciedad y el jabón se enjuagarán totalmente con abundante agua.
  11. Evitar los secadores de aire caliente, así como las toallas de papel de baja calidad, puesto que resecan la piel. La mejor opción son los dispensadores automáticos de toallas de tejido.
  12. Tener precaución con el uso indiscriminado de los guantes de látex, en especial el personal sanitario, de la limpieza, de laboratorios y peluquerías, puesto que una exposición prolongada a este material, como reacciones alérgicas al mismo, pueden ocasionar enfermedades en la piel.
  13. Es conveniente usar los guantes de látex sólo cuando sea necesario y de forma alternativa con otros de distinto material (limitar la exposición)


Factores que influyen en la absorción de sustancia químicas en la piel

• Las sustancias con propiedades simultáneamente hidro y liposolubles son las que más fácilmente atraviesan la barrera cutánea.
• Muchos detergentes y disolventes son capaces de alterar la piel provocando un aumento de su permeabilidad a las sustancias químicas.
• Los ácidos y las bases pueden dar lugar a una desnaturalización y destrucción de los componentes de la piel provocando un aumento de la absorción por esta vía.
• El área de contacto con la piel, la duración del contacto de la sustancia con la piel y la concentración de la sustancia influyen sobre la cantidad absorbida.
• Si aumenta la temperatura o la humedad ambiental, aumenta también la absorción de las sustancias por la piel.
• La posibilidad de absorción de las sustancias químicas por la piel aumenta si la piel no está bien hidratada, si aumenta su temperatura o si existen enfermedades de la piel. Las sustancias químicas se absorben de mayor a menor grado en: escroto, frente, cuero cabelludo, abdomen, parte anterior del hombro, espalda, cara anterior del antebrazo, palma de las manos y planta de los pies.

viernes, 24 de febrero de 2012

SUSTANCIAS QUIMICAS PELIGROSAS

¿Qué son las sustancias químicas peligrosas?


Un sustancia química peligrosa es aquella que representa un riesgo para la salud y la seguridad de los trabajadores y el medio ambiente, debido a:
  • sus propiedades físico-químicas, químicas y toxicológicas;
  • la forma en que se utilizan (polvo, aerosol, líquido…); y
  • la forma en la que se encuentran en el lugar de trabajo. Por ejemplo, usar agua a temperatura ambiente no supone un riesgo, pero cuando ésta se calienta hasta los 100°C, el   contacto con el líquido o el vapor puede ser muy peligroso.


¿Qué aspecto tienen las sustancias químicas?


Formas físicas o “estado’’
Las sustancias químicas pueden estar presentes bajo distintas formas, siendo las principales:
Sólida: esta forma es la que presenta menos riesgos de contaminación. No obstante, algunas sustancias en estado sólido pueden envenenar si entran en contacto a través de la piel o la comida;
Polvo: el polvo está hecho de pequeñas partículas de sólido. Se puede estar expuesto al polvo en el lugar de trabajo ante materiales que existen normalmente en forma de polvo (por ejemplo, bolsas de cemento), o debido a procesos que generan polvo (por ejemplo, manipulación de fibras de vidrio que generan polvo tóxico);
• Líquido: muchas sustancias peligrosas como ácidos y disolventes se presentan
como líquidos a temperatura ambiente.
Vapor: supone la fase gaseosa de un material que se encuentra como líquido bajo
condiciones normales. Cuando hay pequeñas gotitas de líquido en suspensión en
el aire se lo llama neblina; y
Gases: algunas sustancias químicas existen en forma de gas a temperatura
ambiente. No obstante, algunos químicos en forma líquida o sólida se convierten
al estado gaseoso cuando se calientan.

Otras formas físicas son los humos.
Las sustancias químicas pueden cambiar de forma o “estado” dependiendo de la temperatura y la presión. Por ejemplo, el agua es un líquido entre los 0-100 grados Celsius (°C). Por encima de los 100°C, se encuentra en estado gaseoso (vaho) y por debajo de los 0°C es hielo, en estado sólido.
Como norma general, cuando la temperatura de un sólido aumenta, se convierte a líquido (se funde). Si, el líquido se calienta más, hierve y se evapora, generando humo y convirtiéndose en vapor o gas. Si la presión medioambiental sobre el gas es incrementada
sin cambios en la temperatura, pasa de estado gaseoso a estado líquido. 
Las sustancias pueden cambiar de una forma física a la otra dependiendo de la temperatura y presión. Resulta muy importante tener en cuenta la posible variación de “estado” y forma de las sustancias químicas debido a condiciones externas, puesto que algunas formas físicas tienen un mayor efecto negativo que otras. Por ejemplo, una sustancia que puede no entrañar riesgo 15 en estado sólido, puede convertirse en peligrosa para un/a trabajador/a en estado líquido o gaseoso.

miércoles, 22 de febrero de 2012

SUSTANCIAS NOCIVAS Y PROTECCION RESPIRATORIA EN EL TRABAJO

La presencia de sustancias nocivas puede originar daños orgánicos, agudos o crónicos, cuando su concentración en el aire excede de ciertos límites. Las intoxicaciones agudas se producen por exposición a elevadas concentraciones de sustancias nocivas durante cortos períodos de tiempo; por ejemplo, cuando se trabaja con productos que generan vapores de disolventes en locales cerrados con deficiente ventilación, como sótanos, zanjas, fosos, silos, depósitos, etc.

Las consecuencias pueden ser náuseas, vómitos, dolores de cabeza, vahídos y mareos. En casos graves, pérdida del conocimiento, y en casos extremos, la muerte por parada respiratoria. Dejando aparte los casos graves, por lo general los síntomas de intoxicación desaparecen al poco tiempo, sin causar perjuicios permanentes a la salud.



Pero si durante espacios prolongados de tiempo se inhalan vapores de disolventes  superiores a los Valores Límite establecidos, pueden presentarse daños crónicos, es decir, intoxicaciones crónicas que afectan principalmente al cerebro y al sistema nervioso.

En los casos de intoxicación crónica - al contrario de lo que ocurre en las agudas- al concluir la exposición suelen quedar daños permanentes.

Los contaminantes químicos pueden dividirse en tres grupos:

Sólidos: Son los contaminantes presentes en el aire en forma de partículas con masa  consistente y compacta, como por ejemplo los polvos y los humos (humos generados en los trabajos de soldadura; polvo de madera procedente del lijado y pulido, polvo de amianto generado en la manipulación de frenos y embragues, polvo de cuarzo generado en la  fabricación de artículos de cerámica, etc.).


Líquidos: Son los contaminantes que están en el aire en forma de gotas muy pequeñas. Dentro de este grupo se encuentran las nieblas y aerosoles (nieblas de taladrinas procedentes de las máquinas herramientas, productos plaguicidas finamente pulverizados, aplicación de pinturas por pulverización, etc.).


Gaseosos: Son aquellos contaminantes que no tienen una forma consistente. Dentro de este grupo se encuentran los gases y los vapores (amoníaco, utilizado como refrigerante en instalaciones frigoríficas; óxido de etileno,utilizado como ag ente esterilizador en los  hospitales; monóxido de carbono procedente de la combustión; metano, generado en la descomposición de materia orgánica; dióxido de carbono, generado en los procesos de fermentación; vapores de percloroetileno, utilizado en la limpieza en seco; vapores de pegamentos, pinturas y lacas).



LA INHALACIÓN COMO VÍA DE PENETRACIÓN

La penetración de los gases, vapores, polvos, humos y aerosoles, en el organismo humano tiene lugar, en la mayoría de los casos, a través de las vías respiratorias (inhalación). Los contaminantes entran por la boca o la nariz y pasan a los bronquios y a los pulmones y de aquí al torrente sanguíneo.


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Fte: Asociacion de Prevencion de Accidentes

viernes, 17 de febrero de 2012

COMO IDENTIFICAR EL PELIGRO DE EMPUJE Y ARRASTRE DE CARGA




Criterio de identificación:

Si en una tarea hay empuje y/o arrastre manual de cargas en donde interviene el movimiento de todo el cuerpo (de pie y/o caminando), se debe evaluar el riesgo por este factor.

 
Ejemplo de identificación


CASO: Empuje de carros con mercancía en supermercados

Descripción:
Los proveedores de mercancías, tienen un puesto de trabajo que se encarga de aprovisionar los productos del camión de transporte al local o lineal. Este trabajo requiere el empuje y arrastre de cargas, mediante un carro con ruedas que permite el desplazamiento de la carga.
En este caso concreto, el carro soporta un peso de 80Kg promedio, cada vez que es utilizado por el trabajador para transportar mercancía al cliente. Las distancias a recorrer varían de acuerdo al lugar de aparcamiento del camión y el lugar de descarga de mercancías dentro del comercio.
Fig. Empuje y arrastre del carro de aprovisionamiento de mercancías.
Criterio de identificación:
¿La tarea de aprovisionamiento de mercancía requiere el empuje y/o arrastre manual de cargas en donde interviene el movimiento de todo el cuerpo (de pie y/o caminando)?
Sí, se debe realizar el empuje y arrastre del carro que lleva la mercancía desde el camion hasta el punto de descarga determinado por el comercio. Esta tarea se realiza caminando, normalmente la acion es el empuje del carro.

Es necesario evaluar la tarea de empuje y arrastre por el factor de riesgo de empuje y arrastre de carga.
 Fte: Instituto Nacional de Higiene y Seguridad en el Trabajo de España

martes, 14 de febrero de 2012

ASMA OCUPACIONAL

La exposición a agentes en el trabajo puede inducir asma, o gravar asma pre-existente. El término asma ocupacional (AO) se refiere al asma que ha sido inducida en el lugar de trabajo.

¿Que es el Asma Ocupacional ?

El término asma ocupacional (AO) se refiere al asma que ha sido inducida en el lugar de trabajo. Se define como “una enfermedad caracterizada por limitación variable al flujo de aire y/o hiperreactividad debida a causas y condiciones atribuibles a un ambiente ocupacional específico y no a estímulos encontrados fuera del lugar de trabajo (Bernstein et al. 2006).
Se distinguen dos tipos de asma ocupacional de acuerdo a si aparecen después de un período de latencia: 1. Inmunológica; y 2. No inmunológica”.
En el caso del tipo inmunológico, hay un período de latencia y el mecanismo inmunológico ha sido identificado para la mayoría de los agentes de elevado peso molecular y para algunos agentes de bajo peso molecular. El tipo no inmunológico abarca asma inducida por irritantes o Síndrome de Vía Aérea Hiperreactiva (en inglés RADS), el cual puede ocurrir después de exposiciones únicas o múltiples a elevadas concentraciones de irritantes no específicos.
 

Factores de riesgo en Asma ocupacional

Factores de riesgo ambientales

Tendrán riesgo de padecer este tipo de asma laboral aquellos trabajadores expuestos a altas  concentraciones de sustancias inhaladas irritantes para las vías respiratorias en lugares donde las medidas de ventilación y aireación sean insuficientes para la cantidad de agente en el ambiente. Deberá existir necesariamente un tiempo de latencia de meses o años hasta que se produzca la sensibilización.
A) Concentración: cuanto mayor sea, aumentará el riesgo de sensibilización a la sustancia.
B) Tiempo de exposición: será necesario para dar pie a que se desarrollen los mecanismos inmunitarios en los trabajadores. La experiencia clínica muestra que el paso de los años no hace desaparecer el riesgo de enfermedad pero sí la hace menos habitual.
C) Ventilación y aireación del lugar de trabajo: las condiciones deficitarias favorecerán la sensibilización. 

Factores de riesgo de susceptibilidad individual
 
D) 1. Asociación de Atopia y agentes de EPM: la mayoría de los agentes ocupacionales de elevado peso molecular inducen asma por este mecanismo. La asociación previa de ambos facilita la aparición del síndrome.
2. Asociación de Hiperreactividad bronquial (HRB) previa y agentes de BPM. Muchos de los agentes manejados en el medio laboral pueden ser irritantes para las vías respiratorias, sobre todo los de bajo peso molecular.
E) Hábito de fumar y otros antecedentes : en general, el riesgo de padecer HRB tras la exposición a alergenos laborales es mayor en fumadores, y parece claro que el tabaco favorece la sensibilización. Si se combina el rasgo atópico con el tabaquismo, todavía se incrementa más este riesgo.
Antecedentes personales como inhalación de drogas, infecciones respiratorias de repetición, reflujo gastroesofágico y asma bronquial previo pueden cursar con hiperreactividad  bronquial facilitando el desarrollo de asma laboral. Existen excepciones a este hecho, puesto que para algunos agentes ocupacionales, como es el caso del cedro rojo, se ha visto que el hábito de fumar protege de la sensibilización
 
 

viernes, 10 de febrero de 2012

MANEJO SEGURO DE LOS BULLDOZERS

Los bulldozers no son máquinas excesivamente peligrosas en sí mismas, pero por su tamaño y características pueden producir accidentes muy graves si no se utilizan con las debidas precauciones.

Antes de comenzar el trabajo

• Comprobar que todos los dispositivos responden correctamente y están en perfecto estado: frenos, mandos de dirección, claxon, señal acústica de marcha atrás, luces de aviso, cadenas, etc.

• Asegurar la máxima visibilidad limpiando los retrovisores y parabrisas, y ajustar el asiento y los mandos a la posición adecuada. 

• Verificar que la cabina está limpia, sin restos de aceite, grasa o barro, y sin objetos descontrolados en la zona de los mandos.

• Subir y bajar únicamente por la escalera prevista por el fabricante, utilizando las dos manos, y hacerlo siempre de cara a la máquina.



• Verificar que la altura máxima del bulldozer es la adecuada para evitar interferencias con elementos varios, líneas eléctricas o similares.

Durante el trabajo

• Controlar la máquina únicamente desde el asiento del conductor. No subir ni bajar nunca cuando el bulldozer esté en movimiento.

• No se debe nunca transportar personas en la máquina.

• Prohibir la presencia de trabajadores o terceros en el radio de acción de la máquina.


• Durante la conducción,utilizar siempre un sistema de retención del conductor (cabina, cinturón de seguridad o similar).

• Cuando no se disponga de una buena visibilidad o cuando las operaciones comporten maniobras complejas o peligrosas, el conductor tiene que disponer de un señalista experto que lo guíe.



• En operaciones en zonas próximas a cables eléctricos se ha de verificar la tensión de los mismos para determinar la distancia mínima de seguridad.

• Si la visibilidad en el trabajo disminuye por circunstancias meteorológicas o similares,por debajo de los límites de seguridad, hay que aparcar la máquina en un lugar seguro y esperar.

• Al reiniciar una actividad tras producirse lluvias  importantes hay que tener presente que las condiciones del terreno pueden haber cambiado. Asimismo, hay que comprobar el funcionamiento de los frenos.

• No está permitido bajar pendientes con el motor parado o en punto muerto.

• Debe respetarse la señalización interna de la obra.

• Evitar desplazamientos del bulldozer por zonas a menos de 2 m de la acera de taludes.

• Siempre se ha de extraer el material de cara a la pendiente.

• Trabajar, siempre que sea posible, con viento de espalda para que el polvo no impida la visibilidad del operador.


• No utilizar cucharas y accesorios más grandes de lo que permite el fabricante. 

• En operaciones con traíllas, el bulldozer no se tiene que desplazar a más de 5 km/h.

• Para abatir árboles hay que empujar en la dirección de caída del árbol a una altura de 30 ó 40 cm del mismo.


Mantenimiento y transporte

• Al terminar la jornada o para realizar operaciones de mantenimiento se estacionará el bulldozer sobre un terreno plano, firme, y sin riesgos de desplomes, desprendimientos o inundaciones (como mínimo a 2 m de los bordes de coronación),con el freno de estacionamiento puesto, la palanca de transmisión en punto muerto, y el motor parado. Se cerrará el contacto, se sacará la llave, y se apoyará la pala en el suelo.



• No fumar durante la recarga de combustible ni en zonas de carga de baterías.

• Para transportar la máquina comprobar si la longitud, la tara y el sistema de bloqueo y sujeción del medio de transporte (camión o vagón) son los adecuados. Asimismo, hay que asegurarse de que las rampas de acceso pueden soportar el peso de la excavadora.

Equipos de protección individual

El operador del bulldozer debe utilizar los siguientes medios de protección individual:

• Casco (sólo fuera de la máquina).

• Protectores auditivos:tapones o auriculares (cuando sea necesario).

• Mascarilla (cuando sea necesaria).

• Guantes contra agresiones mecánicas (en tareas de mantenimiento).

• Calzado de seguridad. 

• Fajas y cinturones antivibración.

• Prendas de señalización (sólo fuera de la máquina).


Fte: Asociación de Prevención de Accidentes Laborales

lunes, 6 de febrero de 2012

COMO IDENTIFICAR EL PELIGRO DE POSTURAS FORZADAS


Criterio de identificación:
 
Si durante la jornada de trabajo hay presencia de:

  1. a. Alguna postura de trabajo estática (mantenida durante más de 4 segundos consecutivamente) del tronco, extremidades superiores, extremidades inferiores, cuello, u otras partes de cuerpo; incluidas aquellas que requieren un mínimo esfuerzo de fuerza externa,
  2. y/o,
  3. b. Alguna postura de trabajo dinámica (movimientos) del tronco, de los brazos, cabeza, cuello u otras partes del cuerpo;

Durante un tiempo significativo de la jornada (más de 1 hora), se debe realizar la evaluación por este factor.

No aplica cuando:
 
Se dan algunas de las siguientes situaciones:
  1. • Se han analizado las posturas forzadas de tronco dentro del análisis del riesgo por levantamiento de cargas o por la manipulación manual de personas.
  2. • Se han analizado las posturas forzadas de la extremidad superior (hombro, codo, muñeca y mano) dentro del análisis del riesgo por movimientos repetitivos.
Ejemplo de identificación
 
CASO: Trabajo de oficina, uso de PVD.

Descripción:
En una oficina, un trabajador realiza tareas administrativas, en las que utiliza el ordenador. La disposición del ordenador y de los elementos del escritorio se detallan en la imagen.

                                                                                                                                                        



Criterio de identificación:

¿La tarea de visualización de PVD en el trabajo de oficina, requiere de alguna postura de trabajo estática (mantenida durante más de 4 segundos consecutivamente) del tronco, extremidades superiores o inferiores, cuello, u otras partes de cuerpo?
  1. - Sí, la trabajadora adopta una postura estática mantenida durante más de 4 segundos del cuello para visualizar la pantalla del ordenador, el tronco está en postura estática debido a que está flexionado durante varias horas dado que la trabajadora está sentada.
¿La tarea de visualización de PVD en el trabajo de oficina, requiere que se realice alguna postura de trabajo dinámica (movimientos) del tronco, brazos, cabeza y cuello y/o de otras partes del cuerpo?
  1. - Sí, la trabajadora realiza movimientos de cabeza y cuello y de los brazos.
Es necesario evaluar el riesgo por este factor.
 


Fte: Instituto Nacional de Higiene y Seguridad en el Trabajo de España

viernes, 3 de febrero de 2012

SOLUCION PARA LOS REFLEJOS MOLESTOS EN EL TRABAJO


  1. • Estudiar la posibilidad de cambiar las superficies de la tarea por otras de aspecto mate.
  2. • Colocar el puesto respecto a las luminarias (o las luminarias respecto al puesto) de forma que la luz llegue lateralmente al mismo, por ambos lados.






• Aumentar la proporción de luz indirecta usando colores claros para el techo y las paredes.

• Utilizar luminarias dotadas de pantallas difusoras de gran superficie.

• En caso de trabajar con pantallas de visualización, emplear modelos con tratamiento antirreflejo o, en su defecto, incorporar filtros antirreflejos.

• Estudiar la posibilidad de recubrir las superficies reflectantes con materiales de aspecto mate.

• Reorientar el puesto.

• Localizar las fuentes que causan los reflejos y actuar sobre ellas mediante su apantallamiento o cambio de situación.

• Actuar, en su caso, sobre la iluminación localizada, flexos, etc, si éstos son los que causan los reflejos.



Extraido de Enfoque Ocupacional